La organización Alliance for Broadcasting and Cultural Frequencies

Sennheiser insiste en la importancia de disponer de frecuencias de radio fiables para la industria del entretenimiento

Ya sea para la cobertura de unas elecciones o para conciertos en directo, producciones teatrales y musicales o eventos deportivos, lo cierto es que los micrófonos inalámbricos se han convertido en un componente indispensable de las industrias de la radiodifusión y el entretenimiento. El 1 de diciembre se celebró la conferencia inaugural de la Alliance for Broadcasting and Cultural Frequencies, una coalición alemana que se ha propuesto salvaguardar estas frecuencias para sus usuarios actuales. El doctor en ingeniería Andreas Wilzeck, responsable de política de espectro y normalización de Sennheiser, fue uno de los participantes y nos explica lo que está en juego.

Dr. Wilzeck, ¿podría describir brevemente la situación actual?

En el orden del día de la Conferencia Mundial de Radiocomunicaciones que tendrá lugar en 2023, uno de los puntos que debatirán concierne la banda de frecuencias de 470 a 960 MHz, principalmente con la idea de analizar el uso y las necesidades de espectro de lo que se conoce como Región 1 del UIT-R, que comprende Europa, África y Oriente Medio. También se debatirán posibles cambios reglamentarios en la banda de 470 a 694 MHz. Esta banda, junto con las denominadas “frecuencias culturales”, es la que utilizan hoy día en todo el mundo la radiodifusión terrestre y las aplicaciones inalámbricas PMSE (Programme Making and Special Events, o servicios de realización de programas y acontecimientos especiales), como los micrófonos inalámbricos y la monitorización in-ear.

¿Prevé más pérdidas de espectro para las producciones teatrales y los eventos en directo?

Tenemos que atajar de raíz esta iniciativa porque los artistas, creadores y profesionales del sector PMSE ya se ven a menudo confrontados a problemas de falta de radiofrecuencias para realizar su trabajo. Por eso es esencial que los micrófonos inalámbricos tengan un acceso fiable y mundial a las frecuencias culturales en la banda de 470 a 694 MHz, un objetivo que la organización Alliance for Broadcasting and Cultural Frequencies se compromete a defender.

Durante décadas, estas frecuencias culturales han sido utilizadas conjuntamente por la radiodifusión, la cultura, la radioastronomía y los radares meteorológicos. Esta cooperación positiva y fiable se ha caracterizado por el respeto y el interés mutuos y ha sido un éxito en todo el mundo.

¿Qué le preocupa ahora?

Se están alzando algunas voces que están presionando para que la banda de 470 a 694 MHz se atribuya a la telefonía móvil en igualdad de condiciones con la radiodifusión, es decir, una atribución coprimaria. Esto supuestamente garantizaría un uso flexible de la banda de frecuencias. Pero para una transmisión en directo no se necesita este tipo de “flexibilidad”, en cambio, lo que sí necesita es fiabilidad, por ejemplo, para evitar que los micrófonos o los auriculares in-ear de los artistas fallen durante un espectáculo debido a las interferencias. Además, es imprescindible disponer de un número suficiente de frecuencias libres en cada evento.

¿Hay algún adalid de las frecuencias culturales entre los participantes de la Conferencia Mundial de Radiocomunicaciones?

Durante los debates que se están manteniendo en el UIT-R para preparar la Conferencia Mundial de Radiocomunicaciones, hemos comprobado con satisfacción que hay un claro consenso entre los Estados federados alemanes y los partidos gobernantes en Alemania sobre la continuación del eficaz uso actual de las frecuencias culturales.

Además de Sennheiser, otros fabricantes, usuarios y profesionales del broadcast también están participando activamente en las reuniones con el UIT-R y con los grupos preparatorios nacionales. Personalmente, me gustaría que fueran muchos más los usuarios y sus grupos de interés y asociaciones los que aprovecharan las oportunidades disponibles a nivel nacional para participar en este tema tan importante.

Para la radiodifusión y la cultura, lo que está en juego es la fiabilidad en el uso de los últimos recursos del espectro de frecuencias disponibles en el mundo. La cuestión no es la “flexibilidad”, que ya constituye el tema de los debates sostenidos a muy diversos niveles a favor de la industria de la telefonía móvil, cuyas necesidades están más que sobradamente atendidas. 

Muchas gracias, Sr. Wilzeck, por concedernos esta entrevista. 

Agradecimientos a MAGNETRON.