Naostage mejora la fusión audiovisual del Teatro Musical Karlín con su solución de seguimiento automático.
Situado en el distrito de Karlín en Praga, el Teatro Musical Karlín es el tercer teatro más antiguo, el segundo más grande y ampliamente considerado el más bello de la capital checa. Famoso por sus producciones musicales y operetas, la mayoría de los espectáculos del teatro son musicales. Recientemente, el teatro buscó actualizar su tecnología audiovisual para mejorar su rendimiento y la experiencia del público. Como parte de esta actualización de la infraestructura técnica, el teatro invirtió en la solución de seguimiento automático y sin balizas de Naostage, K SYSTEM.
Implementación y tecnologías utilizadas
La instalación estuvo liderada por Petr Šťásek, consultor técnico de Pro Music, distribuidor recién nombrado de Naostage para la República Checa y Eslovaquia. El equipo técnico instaló un sistema de audio L-Acoustics L-ISA con un sistema frontal de nueve clústeres que proporciona una alta resolución horizontal. «El siguiente paso lógico era rastrear a los actores en el escenario, para que los objetos de audio correspondientes se movieran sin problemas con ellos, permitiendo que el público escuchara las voces naturalmente desde la dirección de los actores», explica Šťásek. Antes de la instalación, el equipo realizó una prueba del sistema para evaluar sus capacidades en el teatro local UFFO en Trutnov, también equipado con un sistema de audio espacial similar.
Tras realizar un análisis exhaustivo del mercado, Šťásek, quien escuchó por primera vez sobre Naostage en ISE 2024 en Barcelona, se dio cuenta de que el K SYSTEM de la empresa era la solución de seguimiento más adecuada y fiable debido a su tecnología única de visión por computadora e IA. Con el apoyo de la identificación por balizas RF, la configuración proporciona un seguimiento preciso y sin interrupciones de los actores.
Beneficios del K SYSTEM
El teatro quería poder rastrear al menos a 16 actores simultáneamente, con la mayor precisión posible durante un solo espectáculo. «Es un entorno muy desafiante», explica Šťásek. «Cada espectáculo trae más complejidad, con numerosas decoraciones en el escenario y actores que usan disfraces elaborados».
Šťásek destaca las diferentes ventajas del K SYSTEM que lo llevaron a adoptar esta tecnología para el Teatro Musical Karlín. «En mi opinión, K SYSTEM es la solución de seguimiento más avanzada del mercado», afirma. Está particularmente impresionado con la flexibilidad, precisión y capacidades de automatización que ofrece el K SYSTEM, lo que ayuda significativamente a mejorar la experiencia audiovisual del público.
Implementación técnica
En el Teatro Musical Karlín, el equipo técnico instaló un potente servidor de procesamiento de IA, KORE, para rastrear hasta 16 actores desde una sola unidad; KRATOS, el software que controla todo el sistema, gestiona la automatización y envía datos de seguimiento en tiempo real a sistemas audiovisuales de terceros; y dos sensores visuales KAPTA, compuestos por cámaras multispectrales, instalados sobre el área del escenario para escanear el espacio en 3D y en tiempo real, uno bajo el clúster de altavoces central y el otro en la parte trasera del proscenio.
Para el Teatro Musical Karlín era crucial asegurar una experiencia audiovisual cohesiva para el público; con múltiples espectáculos por semana, el equipo necesitaba un sistema fiable y que ahorrara tiempo a los equipos técnicos en el lugar. «Utilizando el sistema de audio L-ISA, cada objeto de audio, como micrófono, instrumento y efecto, se complementó con parámetros de panorama, profundidad, ancho y envío auxiliar», explica Šťásek. «Esta configuración determina la ubicación precisa y la manera en que cada sonido es escuchado por el público». En el teatro, el equipo técnico instaló nueve clústeres frontales, distribuidos a lo largo del escenario para optimizar la experiencia auditiva.
Precisión en el posicionamiento
En el teatro, el K SYSTEM proporciona datos de posicionamiento precisos en coordenadas XYZ, que se traducen en información de panorama y profundidad para los actores rastreados individualmente. Sus voces, capturadas por micrófonos inalámbricos, se transmiten a un sistema de sonido espacializado, permitiendo la convergencia de sonido e imagen. «Si la diferencia horizontal entre la ubicación visual de los actores en el escenario y la fuente de audio es menor a 7.5 grados, el cerebro humano fusiona el sonido con la percepción visual», detalla Šťásek. «Esto hace que la actuación suene mucho más natural, ya que el público puede escuchar exactamente quién está cantando porque el cerebro humano localiza naturalmente la fuente del sonido». Añade que esta configuración beneficia a la mayoría del público y no solo a los que están sentados en el centro, «a diferencia de las configuraciones estéreo tradicionales donde la voz puede parecer que viene desde fuera del escenario».
Desafíos y soluciones
Debido a la importancia histórica del teatro, el integrador enfrentó el desafío de instalar los dispositivos en ubicaciones adecuadas. «Necesitábamos ser discretos al colocar los KAPTAs en posiciones óptimas en un escenario abarrotado, para evitar interferencias con las decoraciones móviles y otras tecnologías escénicas», explica Šťásek. «Era crucial que el sistema tuviera una vista despejada y no interviniera con la escenografía, las líneas de visión y la arquitectura del teatro».
Resultados y opiniones
Sin el K SYSTEM, habría sido imposible gestionar el posicionamiento de objetos de audio para 16 actores bailando y cantando moviéndose por todo el escenario durante una actuación en vivo. Este proyecto ha sido una experiencia interesante en un entorno desafiante, y el teatro actualmente presenta seis actuaciones musicales a la semana con un sistema que funciona perfectamente.
El K SYSTEM ha transformado la experiencia sonora en el Teatro Musical Karlín, asegurando que cada actuación ofrezca una fusión audiovisual impecable para todos los asistentes.
